!Cómo pasa el tiempo¡ Parece que fue ayer y han pasado 33 años. Treinta y tres años de vida, de incertidumbre, de vivencias.
Aquellos ojos grandes, azules, llenos de picardías ya tienen la madurez suficiente para discernir y analizar las cosas por voluntad propia.
Hoy quiero recordarlo a través de un poema que le dediqué a su madre hace 22.045 días.
Estos son los ojos de Nino, mi pequeño
que hoy cumple 33 años
que hoy cumple 33 años
TU TIERRA, MI SEMILLA
que siento por ti ternura?
Mis palabras, tu sonrisa,
mis
caricias, tu pasión.
Tu tierra
con mi semilla,
mi apoyo
con tu hermosura,
tus
suspiros con mi brisa,
se funden
con el calor
y hacen
posible una vida,
que son tu
vida, mi vida,
la
gestación de ese niño
que
deseamos los dos.
Amor, ¿Qué me das amor?
Tú la
fuente, yo la sed,
tú el
recipiente, yo el agua,
yo la lava
tú el volcán.
Tú la
abeja, yo la miel.
Tu tierra
con mi semilla
hacen
posible ese amor,
que son tu
vida, mi vida.
Amor, ¿Qué me das amor?
Felicidades a tu hijo, aunque cumpla 33 años todavía es un chico para ti. Nos suele suceder a los padres, nos quedamos pegados en el tiempo, y siempre los vemos como infantes.
ResponderEliminarUn abrazo.
Precioso poema para el hijo, un hijo que a pesar de los años continúa en tu retina como pequeño. Felicitaciones a ti a feliz cumpleaños a tu hijo.
ResponderEliminarAída
Felicidades a ambos. ¡Que profundo llegan los hijos!.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Anbairo: Me sumo a la felicitación por ese cumpleaños de tu hijo y al comentario de que es un poema precioso.
ResponderEliminarPor supuesto que nos seguimos leyendo, un abrazo.
Querida Taty:
ResponderEliminarLos hijos siempre los tendremos pegados a nosotros. Es un vínculo que dura mientras dura nuestra existencia y como bien dices aunque se hagan mayores siempre serán nuestros niños.
Gracias en nombre de Nino y en el mío propio.
Un abrazo
Querida Aida:
Los hijos aunque pasen los años, los padres nos sentimos protectores.
Te doy las gracias por tu comentario al tiempo que agradezco en nombre de Nino, (mi pequeño)
tus felicitacion.
Un abrazo
Amigo Perfecto:
Ciertamente los hijos llegan muy profundos, tanto que somos capaces de cualquier cosa por ellos.
Un fuerte abrazo y gracias de Anbairo e hijo Nino por tus felicitaciones.
Amigo Manuel:
ResponderEliminarMi agradecimiento sincero en nombre de mi hijo y en el mío propio, por pasar por aquí y dejar tu huella.
Un fuerte abrazo y gracias por tu comentario.
Que magnífica válvula de escape tenéis los poetas. Podéis dejar salir los sentimientos con dulzura y orden.Envidia tengo.
ResponderEliminar¿Hijo pequeño de 33 años? Hummm debemos ser de la misma quinta. Es posible que coincidiéramos en Cartagena en nuestros años mozos de estudiante donde pasé 5 años.
Felicidades a tu hijo no solo por cumplirlos sino por de donde le vienen.
Un abrazo
Hola Amigo MAN, seguramente que habremos coincidido en nuestro años mozos de estudiantes en la Ciudad Departamental de Cartagena. Allí cursé Maestría Industrial e incluso puede que nos hayamos tropezado por las calles de mi querida Murcia. Allí pusimos nuestro primer nido cuando nos casamos y allí nació nuestro primogénito (hosp. Virgen de la Vega)como bien sabes, el mundo es un pañuelo.
ResponderEliminarGracias amigo por tu felicitación en nombre de mi hijo y en el mío propio. Es un placer compartir contigo, y gracias por supuesto por tu "dulce, y ordenado sentimiento) a tu hermoso comentario.
Un abrazo
Precioso poema,amigo poeta, y entrañable, muy entrañable. Si para algo sirve la poesía es para poder transmitir ese amor de la manera como tú lo haces. Un abrazo fuerte y gracias por compartir ese amor.
ResponderEliminarMenudo poema y menudos ojos, no sé con qué quedarme. Gracias por haber estado en mi casa; yo me alegro muchísimo de haber venido a la tuya, me he encontrado una grata sorpresa.
ResponderEliminarPor favor, cuando empieces a leer el libro de Manuel, si no te importa, avísame.
Un abrazo.